martes, 14 de julio de 2015

Bienvenido!!


Bienvenido al blog de Endocrinología y Nutrición!!
Este blog está diseñado para explicar que es la endocrinologia y temas relacionados con esta hermosa especialidad . Desde aquí puedes acceder fácilmente a diferentes artículos relacionados a enfermedades metabólicas y videos interactivos.
Dirigida al publico en general interesados por mejorar su salud y vida.



martes, 7 de julio de 2015

Disruptores endocrinos y obesidad, obesógenos.

La incidencia y prevalencia de sobrepeso y obesidad ha experimentado un gran incremento en las últimas tres décadas y afecta a casi todos los países del orbe. Este fenómeno no se explica fácilmente por los cambios del estilo de vida en las distintas poblaciones con hábitos de partida muy distintos. Por lo que además del cambio del estilo de vida, otros factores empiezan a tenerse en cuenta, los llamados disruptores endocrinos y más concretamente los obesógenos. Revisamos la evidencia que existe sobre sustancias químicas que polucionan el ambiente que potencialmente puedan ser obesógenos en humanos: el dietilestilbestrol (DES), la ginesteína, el bisfenol-A, los derivados orgánicos de estaño y los ftalatos. Los tres primeros actúan principalmente sobre los receptores estrogénicos y los derivados orgánicos del estaño y los ftalatos activando los PPARγ. En conclusión, existen evidencias del efecto obesógeno de estas sustancias en estudios en animales de experimentación, tanto in vitro como in vivo, pero muy pocas en humanos.

El aumento explosivo de la prevalencia de obesidad en las poblaciones en las últimas décadas se explicaría por la falta de habilidad del organismo para compensar adecuadamente el estilo de vida moderno, caracterizado por una excesiva ingesta calórica y reducida actividad física. La hipótesis del fenotipo thrifty propone que los rasgos genéticos en la etapa histórica evolutiva en que vivimos no se adaptarían adecuadamente al ambiente obesogénico actual.






Factores de Riesgo Cardiovascular en Poblaciones Jóvenes


La enfermedad cardiovascular (ECV) comprende un grupo de trastornos relacionados con la formación y desarrollo de procesos ateroscleróticos. Los factores de riesgo implicados son múltiples; recientemente se ha reportado un incremento de los factores de riesgo cardiovascular en poblaciones jóvenes y se ha sugerido que el perfil de riesgo cardiovascular en esta población puede ser diferente al encontrado en el adulto. En esta revisión se examinaron artículos recientes y relevantes publicados e indexados en diferentes bases de datos que exploran los factores de riesgo más prevalentes en la población joven y se discuten sus causas. 

La mayoría de los factores de riesgo discutidos corresponden a factores modificables asociados con los estilos de vida. Definir el perfil de riesgo cardiovascular de la población joven aportará herramientas para diseñar estrategias de prevención de la ECV en esta población y podría tener un impacto favorable en la prevalencia de la enfermedad en los próximos años. El seguimiento del 
comportamiento de los factores de riesgo cardiovascular en el tiempo y de la eficacia de las estrategias preventivas brindará datos invaluables acerca de la etiología y prevención de la ECV.



¿Qué es un endocrinólogo?

Un endocrinólogo es un médico especializado en el estudio y tratamiento de enfermedades y alteraciones de las hormonas y las glándulas.

Las hormonas son sustancias que se producen en órganos especiales (las glándulas) que controlan funciones importantes de todo el cuerpo (como el crecimiento, metabolismo, reproducción, etc.)
¿Qué enfermedades diagnostica y trata el endocrinólogo?
Muchas enfermedades dependen de las hormonas o son afectadas por ellas.
Aunque algunas son enfermedades comunes que puede tratar cualquier médico, en ocasiones se requiere la evaluación del especialista o su participación dentro de un grupo médico para lograr su control. Las enfermedades más comunes que trata el endocrinólogo son:
  • Diabetes mellitus (azúcar elevada en la sangre)
  • Alteraciones de colesterol y triglicéridos (dislipidemia)
  • Osteoporosis
  • Menopausia
  • Talla baja
  • Tiroides
  • Alteraciones de metabolismo
  • Infertilidad
  • Exceso o falta de hormonas
  • Tumores de las glándulas
  • Obesidad
Entre otras enfermedades

¿Quién me debe referir a un endocrinólogo y por qué motivos?

Se requiere de la evaluación de endocrinología en los casos en los que:
El tratamiento habitual no ha logrado un control de enfermedades como obesidad, osteoporosis, diabetes, colesterol alterado, etc. y se requiere de la opinión del especialista para descartar alteraciones hormonales adicionales.
Existe una alteración hormonal diagnosticada por laboratorio o se sospecha de ella.
Hay evidencia de un tumor glandular o relacionado con las hormonas.
Cualquier médico puede solicitar la referencia al endocrinólogo, aunque lo habitual en los sistemas de
salud es que los médicos generales o familiares soliciten este envío cuando se considere necesario.



Función endocrina en la obesidad

La obesidad se define como un exceso de grasa corporal. Su manejo clínico es complejo y frecuentemente con pobres resultados. La obesidad abdominal, u obesidad central, refleja la cantidad de grasa visceral y se relaciona de manera directa con la resistencia a la insulina y los eventos cardiovasculares.

Hay una epidemia de sobrepeso y obesidad en todo el mundo. La prevalencia de exceso de peso está creciendo rápidamente a lo largo de EE.UU. y alrededor del 65% de la población adulta tiene sobrepeso u obesidad. Si comparamos el periodo 1976-1980 con 1999-2000, la prevalencia de sobrepeso ha aumentado en un 40% (del 46 al 64,5%) y la prevalencia de obesidad se ha incrementado en un 110% (del 14,5 al 30,5%). España no es ajena a esta epidemia y la prevalencia de obesidad y sobrepeso en nuestro medio ha aumentado de forma dramática, siendo en algunos estudios la prevalencia de exceso de peso (obesidad más sobrepeso) de alrededor del 65% y de obesidad del 25%.

La obesidad es una enfermedad crónica al igual que la hipertensión o la diabetes. La etiología de la obesidad es un desequilibrio entre la energía que se obtiene con la ingesta y la que se consume. El exceso de energía se almacena en forma de grasa corporal en los adipocitos que crecen y/o aumentan en número. Esta hipertrofia e hiperplasia de los adipocitos es la lesión patológica característica de la obesidad. El aumento en el tejido adiposo produce los problemas clínicos asociados con la obesidad, bien por el peso de la masa de la grasa extra o bien por el aumento de secreción de ácidos grasos libres, numerosos péptidos y otras adipoquinas por los adipocitos hipertrofiados. La obesidad y el sobrepeso asocian una serie de alteraciones endocrinas y metabólicas. 

La mayoría de los cambios se piensa que son secundarios a la obesidad, ya que se pueden inducir con la sobrealimentación y se eliminan con la pérdida de peso. La obesidad se acompaña de modificaciones en los niveles plasmáticos de determinadas hormonas y en cambios en sus patrones de secreción y/o aclaramiento. Algunas de estas alteraciones son secundarias a la obesidad mientras que otras podrían desempeñar un papel en su patogenia.





La obesidad: un problema de salud pública

El proceso de globalización que vivimos ha provocado una serie de cambios debido a la confluencia de una compleja serie de procesos sociales, políticos, económicos y culturales que han modificado las costumbres y hábitos, pero sobre todo nuestros estilos de vida. Lo anterior ha generado un aumento considerable de las enfermedades ligadas al consumo excesivo de alimentos. Un claro ejemplo de ello es la obesidad, cada vez más frecuente porque se ingieren cada vez más alimentos muy poco nutritivos y con demasiadas calorías y porque no se lleva a cabo la actividad física necesaria debido a las múltiples opciones que existen en los medios de transporte y a las nuevas formas de trabajo y entretenimiento. 





Tratamientos de la obesidad



Considerando todas las alteraciones que pueden desarrollarse en los niños obesos y el alarmante dato de que la obesidad infantil es un factor de riesgo para la obesidad en la vida adulta, resulta fundamental prevenirla y controlarla desde las primeras etapas de la vida. Debe tomarse en cuenta que el incremento del peso del niño debe ser paulatino; de lo contrario, se deberá buscar ayuda profesional; dependiendo de la gravedad del caso, deberá tomarse en cuenta la opinión de un médico, un nutriólogo y un psicólogo. Para ello, insistimos, se debe buscar fortalecer hábitos saludables que puedan ser adoptados por la familia, como balancear las comidas del día y establecer horarios de alimentación.

Se debe adquirir conciencia de que, además de los cambios en la alimentación, es indispensable incrementar la actividad física diaria, como hacer caminatas cotidianas de al menos media hora y beber un mínimo de dos litros de agua al día, porque no existe una dieta sin ejercicio.


La elevada tasa de obesidad en los niños y adultos es una realidad en nuestro país, ante la que ya no podemos cerrar los ojos. Pero la solución se encuentra cuando cada uno de nosotros haga conciencia y adquiera hábitos de vida saludables.





Tratamiento de la obesidad infantil: Factores pronósticos asociados a una respuesta favorable


La obesidad infantil constituye un gran desafío en la atención de Salud actual, dado el aumento de su prevalencia en Chile, que tiene consecuencias psicológicas y traumatológicas a corto plazo y que se le reconoce como el principal factor de riesgo epidemiológico para las enfermedades crónicas más frecuentes del adulto. Sin embargo, tras variadas modalidades terapéuticas, no se consigue hasta ahora obtener una disminución de las cifras de obesidad.


El aumento del número de niños obesos sobrepasa la capacidad resolutiva de los niveles de atención en la salud pública, que en la actualidad atiende al 75% de los niños en Chile, por lo que se hace indispensable conocer los factores que discriminen entre aquellos pacientes que requieren de un control y tratamiento en un centro de referencia nutricional, de aquellos que deben ser controlados y tratados a nivel de atención primaria, o incluso que no se justifica tratarlos.


Un aspecto importante a considerar en las estrategias de atención de los niños obesos es la recuperabilidad, el riesgo de obesidad del adulto está directamente relacionado con la edad de aparición y con el tiempo de duración de ella; sin embargo, su tratamiento tiene una alta tasa de fracaso y de recidiva, que en experiencias extranjeras supera el 50%, transformándola por lo tanto, en poco motivadora para la estructura de salud, para el equipo profesional y para la propia familia del afectado. Se hace necesario entonces optimizar la atención y los recursos disponibles para el manejo de este problema, considerando modalidades de tratamiento que ofrezcan mejores resultados.


El propósito de este estudio fue analizar factores personales, familiares, clínicos y de laboratorio, predictores de éxito en el tratamiento del niño obeso en un centro de referencia de un hospital público de Santiago.